
El invierno en el Gran Sur es mi época favorita del año para fotografiar esta ribera icónica.
El mes pasado realicé mi séptimo taller anual de invierno en Gran Sur, un lugar donde el paisaje escarpado nunca decepciona. La ausencia de neblina en esta época es una de las atracciones que permite lograr vividos y esplendorosos colores del alba/amanecer y del crepúsculo/atardecer.
Más aún, gracias a la posición del sol durante esta época del año puedes fotografiar por más tiempo los momentos culminantes del día sin la preocupación de la luz dura.
Cuando dirijo un taller, siempre aprendo algo nuevo y recuerdo algunos aspectos fundamentales de la fotografía. A continuación les dejo algunos consejos inspirados en las imágenes preferidas que tomé durante el taller de este año.
Toma en cuenta los teleobjetivos para paisajes
Esta imagen fue hecha al alba desde la cima viendo al sur hacia el Faro en Puerto Sur. El 70-200 mm es un objetivo algo ignorado para paisajes.
Para esta escena, quería comprimir los tres elementos principales en mi composición: el arco del fondo, la cima del medio y la estación del Faro. Capturé esta imagen con el 150 mm y con mi cámara de formato completo, la Sony α7R II. Con una apertura de f/22, fui capaz de conseguir los destellos de la luz fresnel del Faro. Es increíble cómo puede tener tanto peso visual esta pequeña luz.

Para movimiento de olas elige larga distancia
El taller comenzó una tarde con fuertes oleadas. Elegí el Punto Soberano ubicado al norte del Parque Estatal Garrapata, que es una de las locaciones más importantes de oleaje a lo largo de toda la costa, ideal para fotografiar olas.
Una de las claves para fotografiar olas exitosamente es un lente largo y una velocidad de obturación rápida. Capturé esta ola turquesa a 300 mm con una velocidad de 1/1000 de segundo. Con esa velocidad, fui capaz de captar el salpicado por detrás de la ola al romperse.

La paciencia rinde sus frutos
Luego de que el grupo terminara de fotografiar olas, esperamos la puesta de sol. Capturé esta gaviota con el rabo del ojo y esperé a que volara dentro de mi encuadre. Me encanta que esta pequeña ave le diera tanto atractivo visual a esta imagen.
La seguridad primero… ¡Siempre!
A medida que estábamos localizando nuevos escenarios para el taller, decidí chequear la Roca Matterhorn.
Me hubiera encantando incluir esta locación al taller pero decidí no hacerlo por razones de seguridad.
Las altas olas que tuvimos durante el taller hacían de esta plataforma continental un lugar inseguro -lo que yo llamo una “zona de trampa”- sin salida para los participantes. Hice esta imagen durante un día de oleaje medio. Tuve un poco de suerte al ver que el sol se coló entre las nubes. Usé una apertura de f/22 para lograr el destello.

Consulta el calendario
Nuestra primera sesión fotográfica se pautó para captar el amanecer lunar en la Ensenada “Soberanes”. Cada año planifico el taller de acuerdo al ciclo de luna llena, que le permita al grupo capturar la luna llena durante dos mañanas consecutivas.
No estaba seguro si las nubes iban a oscurecer la luna, pero a medida que la luz del alba comenzó a pintar el cielo con esa tonalidad rosa, la luna volvió a verse. Me ubiqué entre las dos columnas de rocas y esperé a que algunas olas rompieran sobre los acantilados.

Abraza el contraste
Una de mis locaciones claves para fotografiar atardeceres durante este taller es la playa Pfeiffer.
En esta época del año, el sol se alinea con la apertura del arco que crea una ráfaga de luz a través del portal. Con toda la lluvia que trajo el fenómeno de El Niño en California, no había habido una sola noche clara en más de un mes.
Cuando llegamos a la playa, ya había más de 50 fotógrafos listos, y ¡todavía faltaban 90 minutos para la puesta de sol! Afortunadamente, todo el mundo se llevó bien y todos pudimos hacer nuestras fotos. Habiendo fotografiado esta locación muchas veces a lo largo de varios años, yo opté por probar el sensor de la Sony α7RII y ver cómo manejaba el contraste.
Como pueden ver, lo pude capturar espléndidamente. Me asombra cada vez que veo cómo este sensor puede captar el contraste tal como lo ven mis ojos.

Piensa más allá de la foto obvia
Llevé a mi grupo a uno de los lugares más emblemáticos del Big Sur: la quebrada McWay en el Parque estatal Julia Pfeiffer Burns.
Nunca me canso de este lugar tan hermoso que incluye una caída de agua fresca de 24 metros de alto. Esa misma tarde, decidí relegar la cascada a un segundo plano, a medida que el sol pintaba el pasto Jabata con una luz cálida, mientras se ocultaba.
Una vez que decidí la composición, era cuestión de tiempo para que el oleaje de la orilla se alineara en la toma.

Sé sutil con el HDR
Durante el mes de enero, el atardecer se alinea con la abertura de la ensenada McWay, lo cual hace que sea un sitio ideal para la fotografía de puestas de sol.
Para esta imagen, combiné 5 cuadros con la técnica del horquillado a 1 paso y las mezclé en postproducción en Lightroom CC 2015, para crear esta imagen que luce natural.
No soy fanático del HDR y afortunadamente el procesado a 32 bits no crea una imagen tan sobre procesada o con ese aspecto chillón que la mayoría de las imágenes de HDR tienen.
Era clave que se mantuviera el aspecto cálido del verdor del pasto jabata en primer plano y una vez más, el rango dinámico extremo del sensor de la α7R II fue indispensable. El pasto luce exactamente como mis ojos lo vieron.

No le temas a la oscuridad
La mayoría de mis talleres incluyen una velada de fotografía nocturna. Tuvimos cielos despejados esa noche en particular y llevé a mis estudiantes al punto Huracán y al Puente Bixby.
Este fue uno de mis últimos fotogramas de la sesión nocturna. Decidí ubicar el puente en el fondo y con la Sony α7S pude plasmar la escena con muchísimo detalle y poco ruido. Siempre fotografío en RAW y cuando uso ISO altas, paso mi archivo por el programa Prime RAW de reducción de ruido DxO Optics Pro 10. Con mis archivos de la α7S, obtengo una imagen virtualmente sin ruido.

Flexiona tus rodillas
Luego de la sesión nocturna, nos quedamos hasta que la luz del alba comenzó a pintar el cielo con sus colores vibrantes. Nuestro grupo pudo hacer fotos en dos lugares esa mañana, mientras la luz se mantuvo vívida.
El punto Huracán fue nuestra segunda parada y llevé a la mano mi Sony RX100 IV casi a ras del suelo para componer esta imagen. Al bajar la cámara y utilizar la pantalla LCD para componer, pude crear esta imagen para darle prominencia a esas pequeñas flores y permitir que la escena tuviera ese primer plano interesante para que combinara con el dramatismo de la costa.
Una vez que convierto el archivo RAW, me queda una imagen de 58 MB de 8 bits para enviársela a mi agencia de banco de imágenes. Esta cámara me permite elegir imágenes que de otra manera podría perder mientras estoy trabajando con mis estudiantes.

Si quieres saber más sobre los talleres de Don Smith y reservar un cupo para su taller del año que viene de invierno en el Gran Sur, ingresa en donsmithphotography.com.
*La disponibilidad de los productos aquí mostrados varía entre localidades. Para más información de su existencia por favor ingresa al Website de Sony de tu país.